por Lourdes Alvarez •
“La formación solamente puede ser dual si está vinculada con la empresa. Lo demás es un sueño romántico”, resaltó Juan Carlos Tejeda, director de formación de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), durante su participación en el curso La FP dual en España, aspectos a tener en cuenta para su desarrollo, dirigido por Pedro Badía Alcalá, director de la Fundación Aspasia, y Estrella Sánchez Corchero, especialista en Antropología económica en la Universidad del País Vasco. Los especialistas abordaron los desafíos y oportunidades de implementar un sistema de Formación Profesional (FP) dual en España, subrayando la necesidad de una colaboración estrecha entre el ámbito docente y corporativo.
De acuerdo con los ponentes, la Formación Profesional dual, un modelo educativo que combina la formación en centros educativos con prácticas remuneradas en empresas, es considerada como una solución para reducir la alta tasa de desempleo juvenil en España. Fernando Luján, secretario de Acción Sindical en la UGT, comentó que, aunque la cifra se sitúa en 28%, la implementación de este sistema enfrenta varios retos, tales como la adecuación de la estructura empresarial del país y la necesidad de homogeneizar los distintos modelos de FP existentes en las comunidades autónomas.
Además, Pedro Badía Alcalá destacó que uno de los principales desafíos es integrar a 1.200.00 jóvenes en el sistema de FP durante el año académico 2024-2025, añadidos a los universitarios, los que pertenezcan a otro tipo de prácticas o estancias en empresas. Asimismo, Badía subrayó que el 99.2% del tejido empresarial en España está compuesto por pequeñas y medianas empresas, lo cual representa un desafío adicional para la adopción del modelo dual. “Las grandes empresas, que representan sólo el 4%, ya tienen experiencia en la implementación de prácticas duales, pero las pymes requieren de mayor apoyo y recursos para seguir este camino”, añadió el director de Aspasia.
Uno de los puntos clave discutidos por Gema Torres Sastre, representante de Comisiones Obreras, fue la necesidad de hacer atractivo el modelo dual tanto para los jóvenes como para los empresarios. Además, Torres indicó que “la burocracia y los costos asociados a la cotización obligatoria de los aprendices son barreras significativas”. La especialista de CCOO mencionó que a pesar de que el 95% de los costos están bonificados, la complejidad administrativa sigue siendo un obstáculo, así como que el reciente Estatuto del Becario plantea más desafíos, ya que podría incrementar la dificultad para que las empresas acojan a jóvenes en formación.
La conferencia también abordó la importancia de cambiar la percepción social de la FP. Pedro Badía Alcalá enfatizó la necesidad de promover una cultura empresarial que valore la formación, no sólo entre los jóvenes y sus familias, sino también entre los propios empresarios. “El modelo alemán de FP dual, que lleva más de 500 años en funcionamiento, es un referente a seguir, pero su adaptación a la realidad española requiere tiempo y esfuerzo continuos,” insistió Badía.